Desde hace aproximadamente tres meses un grupo de investigadores chilenos indaga opciones terapéuticas para combatir los efectos del COVID-19 en personas que padecen el nuevo coronavirus. En medio de esta búsqueda los profesionales médicos identificaron un fármaco que registró favorables resultados en países orientales, por lo que solicitaron la autorización al Instituto de Salud Pública (ISP), que aprobó la importación de 750 mil cajas de Fabi Flu para ser utilizadas provisionalmente en cinco centros de salud, entre ellos el Hospital Regional Libertador Bernardo O´Higgins (HRLBO).
Fabi Flu es el nombre del medicamento indio elaborado a partir del compuesto japonés favipiravir, creado en 2014 para enfrentar los efectos de la influenza, pero que durante la pandemia del nuevo coronavirus ha sido utilizado en países orientales como Rusia, China, India, Turquía, Tailandia, Bangladesh, Indochina y países árabes, arrojando buenos resultados en los pacientes. Su mecanismo de acción es frenar la multiplicación del virus, de manera rápida y eficiente.
“El grupo de investigadores nos vinos a presentar este fármaco para ver la posibilidad de tenerlo aquí y hacer una guía de tratamiento de farmacovigilancia con los pacientes. Este medicamento está probado en algunas partes del mundo. La evidencia indica que tiene un impacto positivo en los enfermos. Esto no es para pacientes graves, es para leves y moderados. Estamos evaluando seriamente la posibilidad de contar con este fármaco”, indicó el director del HRLBO, Dr. Fernando Millard.
Tal como señala el doctor Millard, de aplicarse el tratamiento en el Hospital Regional, los tiempos son muy importantes. De acuerdo al investigador y coordinador académico del Área Clínica y Médica de la Universidad de Chile, Dr. Harold Mix, para que el Fabi Flu tenga efecto positivo, “se debe ocupar lo más precoz posible en pacientes con factores asociados, como obesidad, hipertensión, diabetes, enfermedades respiratorias, factores de riesgo que nos hace presumir que se va a complejizar”.
El investigador y director del Instituto de Investigación Interdisciplinaria en Ciencias Biomédicas de la Universidad SEK, Dr. Luis Velásquez, destacó que en los países donde se utiliza el favipiravir “ha disminuido el ingreso a la UCI en un 50 %, y baja la cantidad de personas mayores de 60 años que ingresan a intubación en un 80 %, lo cual es extraordinario por las secuelas crónicas que deja el COVID-19”.
En esta primera etapa el ISP autorizó su uso médico provisional en los hospitales San Juan de Dios, Félix Bulnes, Valdivia, Puerto Montt y en el HRLBO. “El ISP nos dijo que podía ser utilizado este fármaco en cinco hospitales y hemos estado en reunión con todos ellos para ver la mejor estrategia para empezar a usarlo y así beneficiar a los pacientes. Hay que protocolizar muy bien para ver qué tipo de pacientes reciben el tratamiento”, concluyó el investigador de la Universidad SEK, Dr. Enrique Ayarza.
En Europa, Canadá y Estados Unidos están realizando ensayos clínicos para verificar la efectividad del medicamento. A nivel latinoamericano, Chile tiene la posibilidad de ser el primer país en probar sus efectos, y serán estos cinco hospitales públicos, los encargados de decidir el suministro del Fabi Flu en pacientes COVID-19.
“Nos encantaría contar con un tratamiento que beneficie a nuestros pacientes. Hemos escuchado atentamente la presentación de los investigadores, pero primero debemos evaluar clínicamente su uso y esperamos tener una respuesta definitiva en las próximas semanas”, concluyó el director del HRLBO, Dr. Fernando Millard.