Tras recopilar información residual, originada en indagatorias previas, la Brigada Antinarcóticos y Contra el Crimen Organizado (BRIANCO) Rancagua, desarrolló una investigación cuya duración alcanzó casi cuatro meses, en la cual pudieron identificar que al interior de un domicilio ubicado en acomodado sector del Polo de Machalí, existía un cultivo indoor de un tamaño considerable.
De igual manera, los detectives pudieron determinar que la droga cultivada en aquella propiedad, era distribuida a diversos microtraficantes de Machalí y Rancagua, información que fue proporcionada al fiscal de la causa, quien gestionó una orden de entrada y registro a la propiedad.
Tras ingresar al inmueble, los oficiales policiales comprobaron la existencia de 91 plantas de cannabis en etapa de crecimiento, las que eran cultivadas en una habitación de 60 metros cuadrados, mediante un sofisticado sistema que permitía mantener la temperatura, humedad e iluminación ideal para maximizar el crecimiento las especies vegetales, droga que fue incautada junto a 5,1 kilos de cannabis procesada, reflectores, fuentes de poder, vehículos motorizados, ventiladores, una pistola a fogueo, una balanza digital y otras especies asociadas al ilícito.
Producto de lo anterior, la PDI detuvo a un hombre y una mujer de 41 y 40 años respectivamente, por su participación en los delitos de cultivo y tráfico de drogas, siendo la última dejada en libertad por instrucción del fiscal de la causa y apercibida en términos del artículo 26º del Código Procesal Penal, mientras que el hombre fue puesto a disposición del Juzgado de Garantía de Rancagua, para su correspondiente control de detención.
